Ainsss

A veces me dan unas rayadas importantes con respecto al embarazo, porque comienzo a pensar y si tengo una tripa muy grande y no puedo con ella, que en el fondo soy una debilucha? No me la puedo quitar y si me entra la depresión posparto esa y estoy dos semanas que no quiero ver al Bebé. Se lo cuento a R. que siempre me abraza y me dice cosas alentadoras, me da fuerzas, tengo la serenidad de que si yo caigo ella va estar detrás para arreglarlo todo. Es como que tiene el poder de solucionarlo todo, se que si no fuese porque esta a mi lado a veces me derrumbaría totalmente, tengo fe ciega en ella y lo peor es que R. esta cogiendo la fea costumbre de pensar que lo que ella no solucione lo haga yo, tiene fe en mí (es muy lista, pero tiene sus fallitos, jeje)

Y anoche me pregunta tan fresca ¿me quieres? Me quede mirándola, un instante preguntándome como podía dudar de que la quisiera, porque es imposible no quererla, de verdad, que no lo digo porque este cegada de enamoramiento ni tonterías de esas, sino porque no solo es preciosa, inteligente, cariñosa, detallista aunque tienda a estar en la parra, sino porque es un sol. Sabes como me siento yo cuando esa mujer me mira y me dice “te quiero”? me siento volar. De todas formas no me tomes muy en serio que ve va a venir la regla y tengo las hormonas a flor de piel.

Y en nada ponemos la calefacción central para que Bebé no pases ni una gotita de frío, ya estamos preparando todo para tu llegada, poquito a poco, pero estamos en ello. Y en esta semana o como mucho la que viene tiene que llamar mamá de nuevo para pedir hora para la clínica, que para una vez que se decide resulta que hay un médico que no se que y tienen las agendas de mayo cerradas y las de abril las tenían muy llenas, debe de ser que la primavera la sangre altera y todas queremos quedarnos embarazadas en primavera.

A ver si llama el miércoles, se lo sugeriré sutilmente, le pondré una nota en el frigorífico o en la pantalla de la tele, eso siempre queda muy sutil, no? Jeje